Rosario de la Santísima Virgen María

Oración

El primero de estos misterios es el Padre Nuestro y su Agonía en el Huerto de los Olivos; el segundo, su Flagelación; el tercero, coronado de espinas; el cuarto, su Carga de la Cruz; el quinto, su crucifixión y muerte en el Calvario. Y luego puedes esperar grandes cosas de su generosidad. Ella es nuestra Madre y nuestra amiga. Ella es la emperatriz del universo y nos ama más de lo que todas las madres y reinas del mundo han amado jamás a ningún ser humano, pues, como dice San Agustín, la caridad de la Santísima Virgen supera con creces el amor natural de toda la humanidad.

Así, sin peligro de ser engañado, llegará fácilmente a la plenitud de la era de Jesucristo. En cambio, si Dios en su infinita misericordia te atrae hacia él con tanta fuerza como lo hizo con algunos de los santos al rezar el Rosario, hazte pasivo en sus manos y déjate atraer hacia él. Deja que Dios trabaje y ore en ti y déjalo rezar tu Rosario a su manera, y eso será suficiente por el día. Créame, querido hermano de la Cofradía del Rosario, san benito si de verdad desea alcanzar un alto grado de oración con toda honestidad y sin caer en las ilusiones diabólicas tan comunes entre quienes practican la oración mental, recen todos los días el Rosario completo. Meditemos, entonces, la vida y los sufrimientos de nuestro Salvador por medio del santo Rosario; aprendamos a conocerlo bien ya agradecerle todas sus bendiciones, para que el día del Juicio nos cuente entre sus hijos y sus amigos.

La bandeja de sus buenas obras fue superada en gran medida por sus pecados e imperfecciones. Habiendo decidido pedirle consejo a Santo Domingo sobre su vida espiritual, le hizo su confesión. Como penitencia, le dio un rosario para que rezara y le aconsejó que lo rezara todos los días. Se disculpó diciendo que tenía sus san miguel arcangel ejercicios habituales, que iba todos los días a las estaciones de Roma, que vestía saco además de una remera, que se aplicaba la disciplina varias veces a la semana, que a menudo ayunó e hizo otras penitencias. Santo Domingo la instó una y otra vez a seguir su consejo y rezar el Rosario, pero ella no quiso escucharlo.

Rosario de la Santísima Virgen María (Letanía)

A partir de entonces perseveró en la devoción al Rosario, llevó una vida ordenada y murió felizmente. La santa Blanca de Castilla, reina de Francia, estaba profundamente afligida porque doce años después de su matrimonio todavía no tenía hijos. Cuando Santo Domingo fue a verla, le aconsejó que rezara el Rosario todos los días para pedirle a Dios la gracia de la maternidad, y ella siguió fielmente su consejo. En el año 1213 dio a luz a su hijo mayor, que se llamaba Felipe. Esto le fue concedido, porque en 1215 nació San Luis, el príncipe que se convertiría en la gloria de Francia y el modelo de los reyes cristianos.

• Les da una maravillosa fertilidad espiritual para que puedan crecer en todas las virtudes.
• El Ave María es un rocío bendito que cae del cielo sobre las almas de los predestinados.
• El Credo o Símbolo de los Apóstoles, que se dice en el crucifijo del rosario, es un resumen sagrado de todas las verdades cristianas.
• «Todo aquel que se acerca a Dios debe creer», y cuanto mayor sea su fe, más mérito tendrá su oración, más poderosa será y más glorificará a Dios.
• Es una oración que tiene mucho mérito, porque la fe es raíz, fundamento y comienzo de todas las virtudes cristianas, de todas las virtudes eternas y de todas las oraciones que agradan a Dios.
• Cuanto más se riega el jardín del alma con esta oración, más iluminada nos volvemos, más celoso de corazón, más fuertes contra todos nuestros enemigos.

Ahora el santo Rosario, rezado con la meditación de los sagrados misterios, es un sacrificio de alabanza a Dios por el gran don de nuestra redención y un santo recordatorio de los sufrimientos, muerte y gloria de Jesucristo. Por tanto, es cierto que el Rosario da gloria y alegría añadida a nuestro Señor, a nuestra Señora y a todos los bienaventurados, porque no pueden desear nada más grande, por el bien de nuestra felicidad eterna, el credo catolico que vernos dedicados a una práctica tan gloriosa. para nuestro Señor y tan saludable para nosotros. El santo sacrificio de la Misa honra infinitamente a la Santísima Trinidad porque representa la pasión de Jesucristo y porque a través de la Misa ofrecemos a Dios los méritos de la obediencia de nuestro Señor, de sus sufrimientos y de su preciosa sangre. Toda la corte celestial recibe también una alegría adicional de la Misa.

Hace mucho tiempo, Moisés fue inspirado por Dios para ordenar al pueblo judío que nunca olvidara las gracias que habían sido derramadas sobre ellos. «Oh, todos los que pasan, hagan una pausa», dice, «y vean si alguna vez ha habido un dolor como el que he soportado por amor a ustedes. Tenga en cuenta mi pobreza y mis humillaciones; piense en la hiel y ajenjo tomé para ti en mi amarga pasión «.

Estas historias muestran el poder del Santo Rosario para vencer todo tipo de tentaciones de los espíritus malignos y todo tipo de pecados, porque estas benditas cuentas del Rosario ponen a los demonios en fuga. El beato Alan relata que un hombre que conocía había intentado desesperadamente todo tipo de devociones para deshacerse del espíritu maligno que lo poseía, pero sin éxito. Finalmente, pensó en llevar el rosario al cuello, lo que lo alivió considerablemente. Descubrió que cada vez que se lo quitaba el diablo lo atormentaba cruelmente, por lo que decidió usarlo día y noche.

Abandonó el confesionario, horrorizada por los métodos de este nuevo director espiritual que se había esforzado tanto por persuadirla de que tomara una devoción que no le gustaba. Pero si todavía estás en el estado de contemplación activa o en la oración ordinaria de quietud, de la presencia de Dios, oración afectiva, tienes aún menos motivos para renunciar al Rosario. Lejos de hacerle perder terreno en la oración mental o de detener su crecimiento espiritual, será de gran ayuda para usted. La encontrarás como una verdadera escalera de Jacob con quince peldaños por los que pasarás de virtud en virtud y de luz en luz.

Esto ahuyentó al espíritu maligno para siempre porque no podía soportar una cadena tan terrible. El beato Alan también testifica que liberó a un gran número de poseídos poniéndoles un rosario al cuello.

Don Pérez se arrodilló y rezó el Rosario; entonces sintió el deseo de hacer su confesión, lo que hizo con sincera contrición. Santo Domingo le ordenó que rezara el Rosario todos los días; prometió hacerlo e inscribió su propio nombre en el registro de la Cofradía. Cuando salió de la iglesia, su rostro ya no era horrible de contemplar, sino que brillaba como el de un ángel.

El ejemplo de San Francisco de Sales, el gran director espiritual de su tiempo, debe impulsarlos a unirse a la santa cofradía del Rosario, ya que, a pesar de ser un gran santo, se comprometió por voto a rezar el Rosario completo todos los días por mientras viviera. Más tarde, cuando estaba en oración, cayó en éxtasis y tuvo una visión de su alma compareciendo ante el Juez Supremo. San Miguel puso todas sus penitencias y demás oraciones en un lado de la balanza y todos sus pecados e imperfecciones en el otro.